Banca Multilateral de Desarrollo | ||
BIC preocupado por gasoducto Bolivia-Brasil Carta del Bank Information Center (BIC) dirigida a los directores del proyecto de construcción del gasoducto Bolivia-Brasil, Holtz y De Franco, del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y del Banco Mundial respectivamente.
En vista de la proximidad de las negociaciones en torno al proyecto de construcción del gasoducto Bolivia-Brasil, quisiéramos transmitirles algunas observaciones y preocupaciones relativas al proyecto y a sus impactos futuros. Necesidad de un continuo respaldo del Banco en los aspectos de participación, divulgación de la información, y temas sociales y ambientales En primer lugar, quisiéramos encomendarles, a ustedes y a su equipo, que presten atención a los numerosos e importantes aspectos ambientales y sociales relacionados con este proyecto. En general nos ha conformado la sensibilidad del Banco Mundial hacia las preocupaciones de la sociedad civil y su firme posición en pro de la acción con los prestatarios y sus asociados en temas relativos a medio ambiente, participación, demandas y pueblos indígenas. Estamos seguros de que comparten nuestra convicción de que la participación plena de las comunidades afectadas es la única manera de asegurar la protección de sus derechos e intereses a lo largo del proceso. También contribuirá a obtener proyectos social y ambientalmente más racionales. Confiamos que ustedes continuarán poniendo énfasis en estos temas en las negociaciones finales con Petrobras. Preocupación acerca del cumplimiento de las medidas de mitigación y compensación de los impactos sociales y ambientales por parte de los patrocinadores del proyecto Varias ONGs y organizaciones indígenas nos han expresado una gran preocupación por la actitud obstinado y difícil de los patrocinadores de Petrobras y otros proyectos. Hasta la fecha, sus acciones han demostrado falta de respuesta a las preocupaciones de las ONG y falta de compromiso con una aplicación de buena fe de los planes de mitigación social y ambiental. Esto quedó especialmente de manifiesto con el inicio de las obras por parte de la Petrobras en la zona del Pantanal boliviano antes de establecer un monitoreo ambiental y un sistema de supervisión, así como por el incumplimiento de los procedimientos delineados en el plan de manejo ambiental. Además, es motivo de gran preocupación que el proyecto de construcción tanto en el lado boliviano como en el brasileño esté avanzando a pesar de que los patrocinadores no han estado muy dispuestos a firmar un acuerdo justo sobre compensaciones y medidas de mitigación. Recientemente, varias ONGs enviaron una carta a Petrobras delineando sus preocupaciones primarias y pidiendo una respuesta a diversos asuntos. Hasta ahora la respuesta no ha llegado, aun considerando que estos son temas cruciales que es necesario abordar antes de la construcción En conjunto, estas acciones indican que los patrocinadores del proyecto parecen más interesados en culminar rápidamente el proyecto para evitar multas financieras con el gobierno de Bolivia, que en responder adecuadamente a los temas sociales y ambientales. Esto nos lleva a preguntar cómo es que los Bancos asegurarán la plena ejecución de los planes de mitigación y compensación. Recomendaciones para los Bancos A efectos de fomentar la transparencia y la responsabilidad en este proyecto, nos gustaría hacer las siguientes recomendaciones. 1) Es fundamental que los Bancos hagan públicos los pactos sociales y ambientales del acuerdo de inversión con Petrobras, antes de la aprobación del préstamo. Al hacer públicos los aspectos sociales y ambientales del acuerdo, los Bancos asegurarán que todos los involucrados tengan una clara comprensión de lo que se espera de Petrobras y de otros patrocinadores en términos de procedimientos de mitigación de impactos sociales y ambientales, monitoreo y compensación. Esto promoverá la responsabilidad de los prestatarios ante las comunidades afectadas y ayudará a los Bancos a promover una aplicación más estricta de los acuerdos. 2) Los Bancos deberán asegurar que el acuerdo final con Petrobras para el préstamo incluya tantos detalles como sea posible en los procedimientos exigidos de mitigación de los efectos ambientales y sociales, planes de monitoreo y compensación, incluso el establecimiento de referencias, procedimientos y recursos en el caso de no cumplimiento (por ejemplo, multas financieras como también incentivos para el cumplimiento para contrarrestar el incentivo financiero actual para una rápida terminación del proyecto). 3) Los Bancos deberían presionar a Petrobras para que no comience la construcción hasta que: a) complete el sistema de monitoreo (con un auditor independiente), b) el plan final de manejo ambiental, el plan de desarrollo de los pueblos indígenas y el plan de comunicación social hayan sido ampliamente difundidos entre las comunidades afectadas, c) se efectúen consultas con las comunidades cercanas a los campamentos de los trabajadores y se divulgue ampliamente la información relativa al código de conducta de los trabajadores y el sistema de solución de reclamos/conflictos; y d) los planes de desarrollo indígena estén terminados. El Banco también debería insistir en que una de las condiciones para conceder el préstamo es que no se realicen ningún tipo de actividades de construcción en el Pantanal durante la época de lluvias. 4) Los Bancos deberían consignar en el acuerdo de préstamo una función de estrecha supervisión en ambos lados, el boliviano y el brasileño, y asegurar la vigilancia de toda la construcción del proyecto. 5) Los Bancos deberían abstenerse de entrar en negociaciones finales con Petrobras hasta que se haya dado solución a los temas planteados en la carta de las ONG a satisfacción con las comunidades afectadas. Impactos a largo plazo del futuro desarrollo de petróleo y gas Como ya les hemos expresado en cartas anteriores, también estamos muy preocupados por el impacto río arriba y otros impactos indirectos del proyecto. Como ya saben, la gran capacidad de los gasoductos ofrecen un incentivo significativo a las compañías de petróleo y gas para la exploración extensiva en la frágil cuenca del Amazonas boliviano. Además, informes recientemente publicados confirman la intención del grupo Royal Dutch Shell de exportar gas desde los campos de Camisea en bosque amazónico peruano hacia Brasil a través del gasoducto, abriendo brecha en una vasta e intocada región de la preciosa selva, en territorios indígenas. Dada la significativa inversión de los Bancos en el gasoducto, creemos que tienen la responsabilidad de exhortar a los gobiernos e industrias de la región a proceder con suma precaución hasta que se pueda aplicar un adecuado marco regulador y se hayan evaluado plenamente los impactos sociales, ambientales y culturales de las futuras actividades de exploración y desarrollo. Esperamos que los Bancos trabajen estrechamente con los gobiernos y la industria para desarrollar planes de manejo ambiental y social culturalmente armónicos, que protejan la base de recursos naturales, promuevan la participación de la comunidad y salvaguarden los derechos e intereses de los pueblos indígenas que habitan en zonas de exploración. Además, la creciente especulación de tierras y la presión para el desarrollo resultantes de este gasoducto necesitan la creación de un sistema de titulación de tierras totalmente financiado. Entendemos que los patrocinadores no están dispuestos a cubrir ni el costo de esta actividad ni los costos de la mitigación por los impactos río arriba. Nos gustaría saber cuáles son los planes de los Bancos para asegurar la plena financiación y ejecución de estas actividades cruciales con la participación de las comunidades afectadas. A la espera de su respuesta, lo saludamos respetuosamente Kari Hamerschlag
|