ONGs advierten

Una conferencia de ONGs realizada en Bangkok antes de la Reunión Cumbre Euroasiática llamó a los dirigentes políticos a no introducir nuevas medidas de liberalización que, expresó, irían en contra de los intereses de los países en desarrollo

Los representantes de las ONGs exhortaron a los dirigentes asiáticos particularmente a no aceptar una propuesta que presentada por la Unión Europea para introducir un nuevo acuerdo multilateral en materia de inversión de la Organización Mundial de Comercio en la Reunión Ministerial que tendrá lugar en Singapur el próximo mes de diciembre.

En el encuentro de las ONGs participaron 350 representantes de grupos cívicos europeos y asiáticos, así como medios de prensa y varios integrantes de misiones diplomáticas (presentes como observadores).

La Cumbre, que se realizó entre el 1º y 2 de marzo, contó con la presencia de 15 dirigentes europeos y diez del este asiático.

El primer día de la reunión de las ONGs se organizó una discusión en grupo sobre temas económicos que afectan las relaciones entre la Unión Europea y Asia. El punto más alto de la sesión lo constituyó una acalorada discusión sobre la iniciativa de la UE para que los dirigentes asiáticos aprobaran en la Reunión Cumbre de Asia y Europa una medida conducente a un acuerdo multilateral en materia de inversión de la OMC.

Consenso que no fue

Se cree que uno de los principales objetivos de Europa en la referida Cumbre era conseguir un consenso euroasiático para que la Reunión Ministerial de la OMC en Singapur sirva para dar inicio a las negociaciones en materia de inversión.

A su arribo a Bangkok para la Cumbre, el presidente de la Comisión Europea, Jacques Santer, declaró ante el diario Bangkok Post que la reunión era "una oportunidad para que los países europeos identificaran áreas de cooperación en política y seguridad y para reiterar su compromiso de concluir un acuerdo multilateral en materia de inversión con Asia, dentro del marco de la Organización Mundial de Comercio".

Se dijo que el vicepresidente de la Comunidad Europea, Sir Leon Brittan, había "exhortado a los países asiáticos a participar en discusiones sobre la creación de un código multilateral en materia de inversión".

La premura europea

Un documento no definitivo sobre la posición de la Unión Europea en la Reunión Cumbre de Asia y Europa -indicando sus temas prioritarios para la Cumbre- establece que los "altos funcionarios (de la misma) podrían ser invitados a mantener discusiones que apunten a dar al tema de la inversión la máxima prioridad en la OMC con miras a preparar el camino para las negociaciones en un marco global de normas de inversión.

"Debe buscarse un diálogo con miras a establecer disciplinas internacionales firmes en este ámbito, que cubran la no discriminación, la protección al inversor y la transparencia."

Advertencia de ONGs

En la Conferencia de las ONGs, los oradores y participantes señalaron que si se aplicara este tratado propuesto por los europeos habría consecuencias adversas para los países en desarrollo. Las empresas locales, predios rurales, bancos y otras instituciones no serían suficientemente fuertes para competir con las trasnacionales, y muchos tendrían que cerrar, dejando a la gente sin trabajo.

"Los gobiernos perderían su derecho a regular las inversiones extranjeras y de esa manera dejarían de tener control sobre los recursos nacionales o la soberanía económica, y sobre las políticas macroeconómicas y financieras", declaró Martin Khor, director de la Red del Tercer Mundo en Malasia.

"Muchos países del sudeste asiático que ya tienen problemas con su balanza de pagos enfrentarán una situación muy difícil debido al aumento del egreso de las ganancias y a mayores importaciones de los inversores extranjeros."

Las ONGs subrayaron que no estaban en contra de las inversiones extranjeras per se, las que pueden jugar un papel importante en el desarrollo de Asia, siempre y cuando se den en el contexto político adecuado.

Pero si los gobiernos ya no pueden regular a los inversores extranjeros -por ejemplo en los ámbitos de equidad, transferencia de tecnología, limitaciones a las importaciones y a las ganancias, etcétera-, entonces las desventajas superarán a los beneficios, y en lugar de contribuciones positivas, la inversión extranjera podría provocar desastres económicos y sociales en toda la región asiática.

(Fuente: Red del Tercer Mundo)